Ultrasonido hepático (Hígado y vías biliares)
¿En qué consiste?
Un ultrasonido hepático y de vías biliares es un examen médico no invasivo que utiliza ondas de sonido de alta frecuencia para producir imágenes del hígado y la vesícula biliar. Durante el examen, un médico radiólogo colocará un dispositivo llamado transductor sobre la piel del abdomen del paciente. El transductor envía ondas sonoras a través de los tejidos del cuerpo, y las ondas sonoras rebotan en los órganos internos, creando una imagen en una pantalla de computadora.
Es una prueba rápida, segura, no invasiva y sin dolor que no utiliza radiación ionizante.
¿Cuales órganos se exploran?
El ultrasonido hepático y de vías biliares se utiliza generalmente para examinar los siguientes órganos:
- Hígado,
- Vías biliares,
- Vesícula biliar,
- Páncreas,
- Bazo.
¿Por qué se solicita un ultrasonido hepático?
Algunas de las enfermedades por las que suele solicitarse un ultrasonido abdominal son:
- Dolor abdominal,
- Piedras e inflamación en la vesícula (Colelitiasis/Colecistitis),
- Tumores del hígado o las vías biliares,
- Infecciones del hígado o las vías biliares,
- Traumatismos (Golpes) abdominales.
¿Cuánto tiempo tarda el estudio?
La duración del estudio dependerá de la complejidad de la patología estudiada, en promedio, con personal experimentado, el estudio demora entre 15 y 30 minutos.
¿Qué preparación requiero?
Generalmente se requiere presentarse con ayuno de 6 a 8 horas, para facilitar la exploración y evaluar adecuadamente la forma del hígado y las vías biliares.
Consulta con el médico radiólogo que va a realizar tu estudio para que te oriente con la preparación ideal para tu estudio.